El insomnio puede tener orígenes diversos:
1. Situaciones que generen estrés, debido a problemas laborales, familiares, sexuales, económicas.
2. Las condiciones físicas del hábitat en el que se descansa.
3. Hábitos irregulares del sueño, como cambios de horarios a la hora de irse a dormir o de levantarse.
4. Malos hábitos alimenticios5. Consumo de sustancias excitantes del sistema nervioso (té, café, alcohol, bebidas con cola, tabaco)
6. Tras intervenciones quirúrgicas (que suelen ser causantes de dificultades para dormir);
7. Privación alcohólica o de otras sustancias depresoras del sistema nervioso;
8. Efectos secundarios de los medicamentos.
9. Estrés post-traumático: después de algún accidente, golpe o traumatismo.
10. Congestión nasal;
11. Necesidad de ir al baño;
12. Estados de ansiedad excesiva (véase crisis de ansiedad o ataque de ansiedad).
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